jueves, 31 de mayo de 2012

Suelo pensar en ti..


Suelo pensar en ti, en tus caricias, en la forma de la que me librabas de las regañeras. Me arrepiento de las veces en las que me porte mal, pero te echo de menos y es que tu faltas abuela, perdón que no te gustaba tu para nosotros eras MAMI … Te as perdió muchas de las cosas importantes que echo o celebraciones familiares, como sé que me estas leyendo te voy a poner al día: Hace poco meses se caso mi hermano, ¿Te gusto la boda? Sé que desde hay arriba lo viste, se te echo mucho de menos. Si,  ya lo se mami estoy mayor y acusa de eso  intento hacer las cosas bien  aunque a veces no me sale muy bien, sé que tu me ayudas. He decidido ser bailarina, sé que no te gustaría mucho pero sé que el día que me suba a un escenario te sentirás muy orgullosa de mí… E n momentos en los que me hundo me encataria que estuvieras aquí  y que me ayudaras. Quiero que sepas que te echo mucho de menos y que daría lo que fuera por volver a verte y sentirte.. TE HECHO DE MENOS MAMI.



jueves, 24 de mayo de 2012

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se logra olvidar, o solo pretendemos que no paso nada?...para mi que no se olvida, se va por la vida amando no olvidando...
nunca se termina bien...porque por algo se termina y si no hay un dolor, aunque sea un sentimiento de nostalgia o de ausencia, no seria lógico no seria justo...muchas veces creemos que nos alejamos de alguien que nos daba momentos únicos y que no pasa nada, pero si pasa...algo se quiebra dentro del alma algo se acaba, pero a veces es lo mejor aunque el dolor de alejarte de esa persona sea peor que los conflictos compartidos porque te acostumbras a luchar por él que para vos es único y sabes que le duele lo mismo que a vos...por eso qué es mejor?...



Solo es lo que es...


"Las cosas espontáneas son así, que nacen poco a poco, sin querer. Sin tener nada premeditado.

Pero luego ocurre, que aparece un "algo" inexplicable, que va cobrando fuerza.

Y fíjate cómo son las cosas, que a veces el “algo” no significa lo mismo para dos personas.

Entonces, una de ellas queda dañada... pero ninguno de los dos tiene la culpa.

Siguen la fuerte llamada del “algo”. Y se dejan llevar para ver qué sucede.

Recorren los rincones de sus cuerpos, buscando, experimentando, saboreando ese algo. Permitiéndose sentir...

Y como todo lo que emociona permanece, no se cansan. Continúan jugando.

Esa persona dañada, confunde el juego con amor. Y la que no se daña pero está presente, piensa que se trata de complicidad.

Es un juego sin reglas. Es un mundo detenido mientras se lanzan los dados.

Y cuando se acaba el encuentro, ni es complicidad, ni es amor.

Sólo es lo que es... los sentimientos de los dos."